jueves, 29 de julio de 2010

Entrevista

Simón Peraza, patólogo y especialista en investigación de cáncer gástrico

El ambiente influye en la aparición de cáncer gástrico

La premisa es trabajar con la prevención primaria, es decir, detectar los factores que influyen en la aparición del cáncer gástrico y evitar la enfermedad.

Con más de 29 años trabajando para el Centro de Control de Cáncer Gastrointestinal “Dr. Luis E Anderson” el patólogo Simón Peraza, dedica su vida a la investigación y tratamiento de la enfermedad que más vidas cobra en la entidad tachirense: El cáncer gástrico.

Su personalidad alegre y optimismo invaden el pequeño laboratorio donde realizan los análisis del cáncer. “Ven mira un estómago, a ese paciente se le detectó el cáncer a tiempo y ya no morirá.”

Peraza también es profesor en la carrera de Ingeniería Ambiental de la Universidad Nacional Experimental del Táchira (UNET). Imparte la cátedra de salud ambiental y paralelamente lleva una investigación bastante interesante sobre una maleza conocida como helecho macho, que crece en las zonas de altura y está directamente relacionada con la aparición del cáncer gástrico.

Cuéntenos un poco sobre su investigación en el cáncer gástrico en el Táchira

El cáncer gástrico es un problema de salud pública que se conoce desde hace muchos años en esta entidad. No obstante médicos como el doctor Luis Anderson ya fallecido y el doctor Walter Oliver ambos gastroenterólogos, al darse cuenta de la problemática que había en el estado llevaron varios trabajos para el final de los años 70 a varios congresos mundiales entre ellos el Congreso Mundial de Gastroenterología en Madrid y médicos japoneses que asistieron ahí se dieron cuenta que realmente era un problema.

Así comenzó la cooperación entre Japón y Venezuela, la cual incluía formación de médicos venezolanos en el Japón, y yo tuve esa oportunidad. Ese es uno de los programas que más éxito ha tenido en Latinoamérica de investigación en cáncer gástrico.

También hubo convenios con la Agencia Internacional del Cáncer en Francia para estudiar la relación de la bacteria Helicobacter Pylori con el surgimiento de cáncer gástrico.

Este centro de control se caracteriza por hacer pesquisas- buscar a las personas cuando aun no tengan síntomas pero puedan tener la enfermedad- y también se atienden pacientes mayores de 35 años con o sin síntomas.

Además de hacer estudios sobre el Helicobacter Pylori También tenemos un postgrado de gastroenterología. Este centro ha ganado varios premios nacionales de gastroenterología y tenemos unos 30 trabajos publicados a escala nacional e internacional.

Peraza habla como si el Centro de Control de Cáncer fuese parte de él, fuesen uno solo. Se siente inmensamente orgulloso y satisfecho del trabajo que realizan allí.

Usted tiene una teoría bastante interesante sobre el Helecho Macho y su vinculación con el cáncer gástrico. Podría explicar ¿En qué consiste esta investigación y cómo lo descubrió?

Nosotros no somos los primeros en decir eso, ya hay literatura previa en otras partes del mundo como Brasil, Costa Rica y parte de Japón. El Helecho macho es una maleza que invade cultivos normales o por el contrario, es más común que sea el hombre quien altere su ecosistema.

El hombre es quien invade las áreas donde vive, que no son áreas adecuadas para la agricultura, pero nuestros campesinos igual trabajan allí, porque no tienen suficientes recursos económicos para adquirir tierras adecuadas o porque ignoran la situación. Eso es lo que se llama ganadería de altura.

El consumo de esta maleza por los bovinos les produce toxicidad, que va desde lesiones leves hasta tumores malignos en el ganado, fundamentalmente en la vesícula o vejiga no en el estómago. Investigadores internacionales como el Dr. Miguel Alonso Amelot químico- ecólogo de la ULA Mérida fue uno de los primeros que detectó la presencia de sustancias cancerígenas en leche de ganado de Mérida y dejó una prueba fehaciente de que la “Ptaquinoside” es una sustancia cancerígena presente en el ganado que consume por error el helecho o porque es lo único que tiene que comer. Luego esa sustancia va a la leche o a la carne que consumimos.

Todas las zonas de montaña donde haya helecho aquí en el Táchira hay alta incidencia de ese tipo de cáncer. Estudios comparativos han demostrado que en la zona del llano hay menos incidencia de cáncer gástrico que en la zona Andina.

¿Qué otros factores ambientales influyen en la aparición del cáncer gástrico?


La infección por Helycobacter Pylori se considera carcinógeno tipo 1 por la Agencia Internacional de Cáncer. Hay evidencia de que produce alteraciones en las células del estómago y se generan tumores. Existe alta incidencia de infección por Helicobacter Pylori no a todas las personas se les desarrolla.

¿Por qué una persona se infecta con el Helicobacter Pylori?

El Helycobacter Es una bacteria que está en el ambiente. La contaminación es fecal-oral. esto quiere decir que no están funcionando bien los tratamientos de aguas, y hay contaminación de alimentos. Los vectores como por ejemplo las moscas pueden transmitir a los alimentos bacterias que luego las consume el humano, además por la mala higiene de las personas.

¿Tiene algunos avances o proyectos por concretar?

Sí. Estamos estudiando los componentes químicos del cáncer para saber si la transformación en la producción de diferentes tipos de mucinas (mocos) está relacionada con diferentes tipos de cáncer. Es decir, el Helicobacter Pylori altera la comunicación de las células entre sí, lo que llaman los signos de señalización que inducen a que una célula entre en mitosis. El Helicobacter hace que la célula comienza a proliferar, a crecer en número porque es un proceso inflamatorio crónico. Entonces la célula que está permanentemente activa reparando tejidos, y en un proceso cíclico de úlcera-erosión hasta que llega un momento en que la célula sufre “un descontrol” y no para de crecer.

¿El Helicobacter Pylori tiene cura o tratamiento?

Si Tiene cura, lo que pasa es que los estudios han demostrado alta resistencia a los antibióticos. Esta situación se da porque la gente se automedica por cualquier dolencia y eso crea resistencia bacteriana. El tratamiento de las amibiasis en épocas de la infancia y juventud también crea resistencia a algunos tratamientos que se contra la bacteria.

Por otra parte, nosotros tenemos que identificar las cepas. No todos lo Helicobacter son genéticamente iguales, y en la evolución de ellos como especie sufren mutaciones, se pueden hacer más agresivos.

El doctor, agitado y ocupado, atiende con una sonrisa. Todo el que llega es recibido amablemente, mientras él sigue trabajando con vocación


La clave es la prevención


La solución del cáncer gástrico está en la prevención primaria: identificar los factores externos entre ellos los ambientales que ocasionan la enfermedad para evitarla, que es lo más difícil. Además se trabaja con prevención secundaria, la más común: detectar la enfermedad cuando sea curable, aplicando exámenes de rutina, en este caso la endoscopia.

Se deben evitar que compuestos los xenobióticos (Pesticidas, cigarrillo, smog, contaminación ambiental, contaminación de residuos sólidos, plásticos que sufren combustión) entren en nuestro organismo y alteren nuestro ADN.

¿Qué opina del tratamiento experimental que desarrolla el Dr. Jacinto Convit y su equipo?

La inmunoterapia funciona en muchas enfermedades, por lo tanto no podemos poner en duda que no funcione en el cáncer. Lo que ocurre es que debemos trabajar por fases y el doctor Convit no está diciendo que ha encontrado la cura del cáncer, sino que está aplicando una técnica de inmunoterapia en una fase para ver cómo responde.
Por ejemplo, hay un tumor que es el cáncer de la vejiga urinaria y a la persona que tiene la enfermedad le inyectan bacilo de tuberculosis, se crea un fenómeno inmunológico contra el cáncer y destruye el tumor.

Pero este tratamiento se aplica localmente. Convit lo que está tratando de hacer es utilizarlo de forma sistémica, en el organismo en general. Yo pienso que es un avance decirlo y hacer este tipo de trabajos, la comunidad científica no se puede cerrar. Hay que tener una visión amplia del conocimiento.

El doctor Peraza, seguirá trabajando en el Centro de Control de Cáncer, en busca de mejores tratamientos e incluso cura. También se dedica a enseñar en la UNET y tiene varios proyectos con estudiantes sobre los efectos del Theridion Aquilino mejor conocido como helecho macho, relacionado directamente con la enfermedad. Un pionero en esta investigación a nivel nacional.